María Freire Rodríguez. Licenciada en Ciencia y Tecnología de los Alimentos por la Universidad del País Vasco. Investigadora en el Cicytex. Mujeres que inspiran 2023.

María Freire Rodríguez – Investigadora en el Cicytex

María, a nosotras nos inspiras, ¿quieres presentarte?:

Me llamo María Freire, nací en Pontevedra donde me crié y estudié hasta irme a la universidad. Así que soy Gallega. Posteriormente, me mudé a Vitoria- Gasteiz para formarme académicamente. Soy investigadora en el Cicytex, el centro publico de investigación de la Junta de Extremadura en Guadajira, Lobón.

Soy Diplomada en Nutrición Humana y Dietética, así como, Licenciada en Ciencia y Tecnología de los Alimentos por la Universidad del País Vasco. De ahí hice el proyecto de investigación de a licenciatura en un centro de investigación del País Vasco y me di cuenta de que lo mío era trabajar en un laboratorio, hacer investigación. Me enganché. Así que posteriormente realicé, paralelamente, el máster en Ciencias Veterinarias en la Universidad Complutense de Madrid y la tesis en el desarrollo de alimentos cárnicos más saludables y potencialmente funcionales en el ICTAN del CSIC de Madrid.

Al acabar mi etapa formativa como investigadora, y ante la falta de posibilidades de una posición como postdoctoral comencé a trabajar en la industria privada. Aunque finalmente, decidí volver a la investigación pública, trabajando en la Facultad de Veterinaria de Cáceres, ahí comenzó mi relación con Extremadura… Me quedé en Extremadura…y hasta ahora que trabajo en el Cicytex.

Las líneas de investigación en la que estoy centrada están relacionadas con los productos cárnicos, muy importantes en esta región. Lo que más me gusta estudiar es la bioquímica de los alimentos, las reacciones, su comportamiento a nivel oxidativo. Así como desarrollar, reformular productos cárnicos potencialmente más saludables.

En paralelo, como me gusta la docencia, y no me he querido alejar del campo de la nutrición humana imparto docencia en varios Másters uno de Nutrición y Salud y otro de Nutrición deportiva. Y el año pasado comenzamos con mi compañera a realizar talleres a jóvenes para que se comiencen a entender el etiquetado de los alimentos, su importancia en cuestión de alérgenos, procedencia, importancia de sus mensajes en el etiquetado, así como que comprendan que es una dieta vegetariana y así acercarse a ellas si les interesan.

Por último, podría definirme como una persona que le gusta aprender, estar en constante aprendizaje, pero de una forma sosegada, a mi ritmo. Esto es lo último, es de vital importancia, uno debe tener tiempo para relajarse y apartarse del trabajo, y así ver los retos científicos desde otra perspectiva, más descansada y fresca. Para ello, hago ejercicio y practico deporte, como la escalada o simplemente senderismo, correr, etc., aunque últimamente esté más parada.

¿A qué querías dedicarte?, ¿Por qué elegiste tu profesión?, ¿Te imaginabas desarrollando el trabajo que realizas hoy?:

Desde pequeña quería trabajar en un laboratorio o en profesiones relacionadas con la salud, como médico de animales, -… según dicen mis padres. Cuando tuve más conciencia me llamaba mucho la atención los microscopios y los laboratorios. De hecho, teníamos (uno de mis hermanos y yo) uno en casa de la serie de nova.

Me gustaba la ciencia y poco a poco fui hacía ella, es la única vía que hay en España de poder trabajar como investigador. La empresa privada tiene mucho que mejorar, entender que la gente altamente formada debe tener salarios dignos y qué funciones tiene un laboratorio de I+D.

No me imaginaba desarrollado el trabajo que realizo hoy, la verdad es que no tenía mucho por dónde iba discurrir mi vida laboral. En un momento, me vi viviendo en el extranjero, pero por motivos personales me tuve que quedar en España y a partir de ahí he desarrollado mi carrera en diversos centros y ciudades.

Háblanos de tus logros y de las dificultades que has encontrado en tu carrera profesional:

Como logro más importante, terminar la tesis. Fue un proceso complicado, duro. Finalizarla ya de por sí fue un logro.

Por otro lado, las dificultades que te encuentras cada día día un investigador en España. Cada vez que se te acaba un contrato, ver si hay posibilidad de permanecer en esa institución o tener que volver a mudarte de cuidad, hacer una vida nueva. Con 30 te parece un reto, pero ya con 40, pesa. Pesa mucho porque tienes a tu lado personas que su vida se ve afectada por tus decisiones laborales. Que básicamente, es la inestabilidad. Supongo, que esa es la dificultad más grande. La inestabilidad. Aunque considero que uno debe moverse, debe entender cómo funciona otros laboratorios, enfrentarse solo a nuevos retos. Eso abre miras y horizontes, pero no como una penitencia. La gente no debe tener ese temor horrible a que si se mueve, no tendrá posibilidad de retorno a su institución de origen. Y además, la sociedad, las instituciones debe entender que los investigadores no son entes individuales, que muchos a determinadas edades tienen familias- de cualquier tipo- y no se pueden estar moviendo por contratos de dos años o inferiores.

Las demás dificultades, pueden ser secundarias, supongo. Aunque ver en algunas instituciones procesos selectivos opacos, poco transparentes, en los cuales personal seleccionado, presenta casi la mitad de méritos, años de experiencia profesional y vital que el resto de candidatos desanima.

¿Qué consejos y sugerencias podrías hacernos?:

Que la ciencia es interesante, te hace crecer, conocerás a mucha gente, tendrás grandes retos en el día a día. Pero es dura, no es un trabajo al uso, con grandes dificultades, pudiendo ser que no llegues a tus metas.